miércoles, 19 de enero de 2011

North By Northwest - Bernard Herrmann


Me da mucho miedo hablar de Bernard Herrmann porque era un genio absoluto. Así que poco contaré acerca de la inconmensurable y impagable obra maestra que escribió para esta entretenida cinta de Hitchcock, a fin de dejar a los oyentes el inmenso placer de descubrirla. La obra abre con el tema principal, que a ritmo de fandango nos introduce en una danza obsesiva e interminable, que si bien, tras el apoteósico comienzo pierde su potente energía, prosigue en un tono más relajado pero igualmente obsesivo y marcadamente herrmanniano, una maravilla para los oídos. En diversos puntos de la obra se recobra el consabido fandango, para exacerbar la acción y el dramatismo hasta puntos casi histriónicos en momentos particularmente tensos del argumento (tales como el asesinato en las Naciones Unidas), y por supuesto, para subrayar el apasionado final.
Una creación inigualable e indispensable.


(regrabación a cargo de Joel McNeely)



martes, 18 de enero de 2011

The Ghost Writer - Alexandre Desplat


Esta es una nueva genialidad de Desplat. Quizás no tan vistosa ni tan sentida, pero si innovadora y creativa. Es una suerte de adaptación del desplatismo al film noir. La música misteriosa y amenazante emplea precisamente las sonoridades propias de este género en los obsesivos ciclos sin fin con aires minimalistas de la música del compositor, que en esta ocasión nos encierran en una cárcel de peligro continuo. La gran virtud de esta banda sonora es precisamente su capacidad para provocar la extraña incomodidad que demanda la película.




jueves, 6 de enero de 2011

Elliot Goldenthal - The Tempest


Ecléctica. Moderna. Atrevida. Enormemente interesante.
Todos esos calificativos... No pertenecen de ninguna manera a esta banda sonora. Dios santo, qué engendro. Goldenthal ha desperdiciado su talento en esta cosa. Y eso es lo que más me duele y me colma de una dolorosa decepción. Elliot Goldenthal siempre me ha parecido uno de los más eclécticos, modernos, atrevidos y enormemente interesantes compositores de hoy en día. Solo hay que escuchar sus trabajos en: Interview with the vampire (obra maestra), Frida, Michael Collins, Final Fantasy. Pero esto es un pequeño desastre. De tanta innovación que quisieron les salió una cosa absurda. Me sobran tantísimo als guitarras eléctricas... Solo se salvan un poco las canciones, llenas de un emotivo lirismo contenido.
En general emite pestilentes efluvios de pretensión.
Pero bueno. Puede escucharse un rato, incluso conviene. Y puede llegar hasta a gustar, con todo ese aire etéreo y místico, si te liberas de la sensación de artificio y fraude. Al fin y al cabo es Goldenthal,y para hacer honor a la verdad, conserva alguno de sus golpes de genio.